09 Apr CELAC en Tegucigalpa: Una cumbre de frases, no de soluciones
Por,
Jesús Daniel Romero, Co-Founder and Senior Fellow, MSI2
El 9 de abril de 2025, la IX Cumbre de la CELAC se reunió en Tegucigalpa, Honduras, con más de una docena de jefes de Estado latinoamericanos incluyendo a Luiz Inácio Lula da Silva de Brasil bajo la bandera de la unidad regional (Gobierno de Brasil, 2025).
Organizada por la presidenta Xiomara Castro durante su presidencia pro tempore, el evento prometió abordar el cambio climático, la seguridad alimentaria y la integración. Sin embargo, tras los discursos pulidos y las fotos, emergió una verdad cruda: la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) sigue siendo un escenario para grandes promesas que rara vez se materializan. Mientras los líderes brindaban por la solidaridad, la cumbre expuso las fallas persistentes de CELAC debilidad estructural, posturas políticas y una desconexión con las duras realidades de la región, todo agravado por la sombra de los aranceles y sanciones del presidente estadounidense Donald Trump.
Un bloque sin dientes en tiempos de crisis
El atractivo de CELAC radica en su visión: una América Latina y el Caribe unida, libre de la supervisión de EE.UU. y Canadá, trazando su propio rumbo (OEA, 2023). La Declaración de Tegucigalpa, preparada por coordinadores el 7 de abril, apuntó alto: piense en el impulso de Brasil por una agenda de mujeres, paz y seguridad o guiños a las metas de seguridad alimentaria del bloque (Gobierno de Brasil, 2025). Pero la ambición no es acción. A diferencia de la OEA, con sus (imperfectos) mecanismos, o la UE, con políticas vinculantes, a CELAC le faltan dientes (OEA, 2023). Sus resoluciones no son vinculantes, su presupuesto es un mosaico y su secretaría es un sueño lejano. ¿El resultado? Cumbres como esta producen declaraciones que acumulan polvo mientras el 30% de la población regional vive en la pobreza y los desastres climáticos golpean a naciones desprevenidas (Banco Mundial, 2024). Honduras misma, aún tambaleándose por huracanes pasados, albergó una reunión que ofreció poco más que lugares comunes (UNDRR, 2023). Si CELAC no puede entregar en una crisis, ¿cuál es su propósito?
Apariencia sobre sustancia
La realización de la cumbre en Tegucigalpa fue un espectáculo de prioridades desalineadas. Honduras desplegó 5,000 policías y 2,000 militares para asegurar el evento, una demostración de recursos que eclipsó las luchas diarias de sus ciudadanos (La Prensa, 2025). Más de 100,000 empleados públicos fueron relegados al “teletrabajo”, las escuelas cerraron y la capital se paralizó, todo por una reunión que los críticos dicen sirvió más para pulir la imagen de Castro que para abordar los problemas locales. Gabriela Castellanos del Consejo Nacional Anticorrupción de Honduras lo llamó “un acto de cinismo”, señalando que los fondos y el personal podrían haber enfrentado la pobreza o la infraestructura en ruinas (CNA, 2025). La ironía se profundiza con rumores de nexos narco: el día de la investidura de Castro, 27 de enero de 2022, testigos afirman que un gran cargamento de cocaína voló desde Venezuela a Honduras, aterrizando esa mañana mientras se desarrollaba la pompa presidencial. Aunque no verificado por registros oficiales, la acusación se alinea con escándalos más amplios que implican a Castro, su esposo Manuel “Mel” Zelaya y su familia en rumores de tráfico de drogas, desde filtraciones de videos de 2024 involucrando a su cuñado Carlos Zelaya hasta antiguas acusaciones de sobornos por el exlíder del cartel Devis Leonel Rivera Maradiaga (InSight Crime, 2024), proyectando una larga sombra sobre su liderazgo y la postura moral de CELAC.
Los aranceles de Trump: Una cuña en la unidad de CELAC
Las amenazas arancelarias de Trump, que escalaron en 2025, golpean a CELAC donde duele: su cohesión económica y política. Muchos miembros de CELAC Brasil, Venezuela y otros se inclinan hacia los BRICS como contrapeso al dominio de EE.UU., soñando con una moneda alternativa al dólar (Reuters, 2025a). Pero la guerra comercial de Trump “America First”, con aranceles del 100% amenazados contra naciones BRICS y un 10% base en la mayoría de los bienes latinoamericanos (subiendo al 15% para Venezuela y 18% para Nicaragua), ha desbaratado esa visión (Casa Blanca, 2025a). El rechazo de India a una moneda BRICS y la negativa de Lula a respaldar la candidatura de Venezuela a BRICS, descartando al régimen de Maduro como una carga, fracturan aún más la alineación del bloque (The Hindu, 2025). Aquí, Lula perdió un momento histórico: en lugar de aferrarse a la retórica anti-EE.UU. de CELAC, pudo haber trabajado con Trump para negociar alivio arancelario para Brasil, aprovechando su peso económico para proteger a la región (Reuters, 2025b). En cambio, su inclinación ideológica dejó a los miembros de CELAC enfrentando una elección cruda: desafiar a Trump y arriesgar represalias económicas o ceder a la presión de EE.UU. y socavar su postura antiimperialista. Honduras, anfitriona de la cumbre, sintió el calor sus exportaciones a EE.UU., como café y textiles, enfrentan costos más altos (USDA, 2025), mientras los presuntos nexos narco de Castro dan a Trump ventaja para apretar las tuercas. Los llamados de la cumbre a la integración sonaron vacíos mientras los aranceles expusieron la incapacidad de CELAC para proteger a sus miembros de choques externos o reunir una respuesta unificada.

Sanciones, simbolismo y disfunción: La crisis de liderazgo de CELAC en 2025
Si los aranceles no fueran suficientes, las sanciones petroleras de EE.UU. contra Venezuela, endurecidas en 2025, golpean al núcleo de CELAC. La revocación de la licencia de operación de Chevron por Trump en febrero y un arancel del 25% a los importadores de petróleo venezolano (efectivo desde el 2 de abril) han reducido las exportaciones de Venezuela en un 11.5% en un mes (Reuters, 2025c; Casa Blanca, 2025b). Esto ahoga a Petrocaribe, el lifeline de petróleo para miembros caribeños de CELAC como Cuba y Nicaragua, que ahora enfrentan crisis de combustible que podrían hacer colapsar sus frágiles economías (Reuters, 2025d).
Mientras la crisis energética se profundiza, las élites de la región muestran su desconexión. Aunque Miguel Díaz-Canel de Cuba no asistió a la cumbre, su gobierno estuvo representado por el canciller Bruno Eduardo Rodríguez, quien probablemente llegó en el jet de superlujo Falcon 900ER, un avión Dassault de $41 millones regalado por Nicolás Maduro. Mientras tanto, Maduro también se ausentó, pero su canciller, Yván Gil, llegó con igual opulencia a bordo del jet Bombardier Global 6000 del régimen. Irónicamente, estas aeronaves, símbolos de exceso y privilegio, fueron adquiridas del mismo imperio que tanto denuncian: Estados Unidos.
Mientras los cubanos comunes soportan apagones continuos y luchan por sobrevivir en medio de una crisis que empeora (en.ara.cat, 2025), el uso de jets de lujo por parte de sus líderes, diseñados para multimillonarios, subraya la creciente brecha de credibilidad de CELAC. Estas escenas socavan la pretensión del bloque de autoridad moral y solidaridad regional.
En marcado contraste, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, sí asistió en persona—una señal temprana de su dirección en política exterior. Sin embargo, su participación vino con una advertencia: afirmó que fue “a insistencia de la presidenta Xiomara Castro”, la anfitriona de la cumbre cuyo gobierno enfrenta acusaciones de larga data de vínculos con el tráfico de cocaína. La ironía no pasó desapercibida para los observadores: Sheinbaum, recién salida de la transición política en México, se destacó sola entre los principales jefes de Estado de izquierda mientras Cuba y Venezuela, vistos como pilares ideológicos de CELAC, optaron por una representación de bajo perfil. Su ausencia dijo mucho.
Jugadores más grandes como Brasil y Colombia, cautelosos ante las represalias de EE.UU., dudan en desafiar las sanciones, a pesar del peso simbólico de Venezuela en el espíritu anti-EE.UU. de CELAC. El rechazo de Lula a la candidatura de Maduro a BRICS ya señaló distancia; las sanciones amplían esa brecha, dejando a Venezuela aislada y a CELAC impotente para protegerla (The Hindu, 2025).
Los problemas de la cumbre se intensificaron con Gustavo Petro de Colombia, quien asumió la presidencia pro tempore de CELAC en marzo de 2025 en medio del naufragio de su política de “Paz Total”. Lanzada en 2022 para poner fin al conflicto de décadas en Colombia, la iniciativa flaqueó cuando las negociaciones con grupos como el ELN se estancaron y la violencia se disparó en regiones como Cauca y Catatumbo (ACLED, 2024). En un paradoxo emblemático de las contradicciones de la política, Petro autorizó bombardeos militares a sitios del Cartel del Golfo a principios de 2025 incluso mientras defendía a miembros de la banda Tren de Aragua como “jóvenes que necesitan amor” tras la visita de la secretaria del DHS, Kristi Noem, a Bogotá el 27 de marzo (CNN Español, 2025).
Con la Paz Total un fracaso doméstico, el liderazgo de Petro en CELAC corre el riesgo de ser un eco vacío de sus grandes promesas. En lugar de forjar una respuesta regional unida, la cumbre de Tegucigalpa expuso las líneas de fractura de CELAC entre ideología y realidad, retórica y gobernanza.
Conclusión: Un bloque a la deriva en un pantano teñido de narco
La cumbre de Tegucigalpa no fue un fracaso de intención, sino de ejecución, y los aranceles de Trump, las sanciones y el liderazgo tambaleante de Petro ensancharon las grietas. El sueño de soberanía regional de CELAC choca con su impotencia práctica, dejándola como un foro de palabras en lugar de un agente de poder. Desde el supuesto vuelo de cocaína el día de la investidura de Castro hasta los problemas petroleros de Venezuela y el vergonzoso giro de Petro de la paz a las frases vacías, el liderazgo del bloque tropieza bajo escrutinio, sus miembros fragmentados por la presión de EE.UU. y la podredumbre interna (InSight Crime, 2024; Reuters, 2025c; CNN Español, 2025). Tras 14 años, CELAC aún no ha entregado más que “diálogo”, sus grandes promesas incumplidas por falta de acción o autoridad. El “pantano teñido de narco” no es solo retórica—el dominio de pandillas en Haití, los cárteles de México y los escándalos de tráfico en Honduras erosionan la gobernanza en toda la región, pero CELAC esquiva estos espinos por temas más seguros como fondos climáticos o el bloqueo a Cuba. Sin mecanismos vinculantes una secretaría, un pacto comercial o recursos compartidos permanece a la deriva, atrapada entre la defiance y la irrelevancia. La oportunidad perdida de Lula de negociar con Trump sobre aranceles encarna la deriva estratégica a la que CELAC se aferra mientras carece del peso para respaldarla (Reuters, 2025b). Las 2,000 becas y reuniones ministeriales de la presidencia de Honduras en 2025 son gestos de buena voluntad, no movimientos de poder. Hasta que CELAC cambie las fotos por pragmatismo, los desafíos de América Latina superarán las promesas de sus líderes.
Referencias
ACLED. (2024). Paradoja de la ‘Paz Total’ en Colombia: La política de Petro redujo la violencia, pero los grupos armados se fortalecieron. https://acleddata.com/2024/11/28/paradoja-paz-total-colombia
CNA (Consejo Nacional Anticorrupción). (2025, 8 de abril). Informe sobre el impacto del IX Cumbre CELAC en Honduras. https://www.cna.hn/informes/2025/celac-summit
CNN Español. (2025, 5 de abril). Petro rechaza declaraciones de la secretaria de Seguridad de EE.UU. https://cnnespanol.cnn.com/2025/04/05/petro-rechaza-declaraciones-noem-tren-aragua
Gobierno de Brasil. (2025, 7 de abril). El presidente Lula asiste a la Cumbre CELAC en Honduras, fortaleciendo la integración regional. https://www.gov.br/planalto/es/ultimas-noticias/2025/04/presidente-lula-asiste-cumbre-celac-honduras
InSight Crime. (2024, 15 de agosto). La familia Zelaya de Honduras bajo escrutinio mientras resurgen acusaciones narco. https://insightcrime.org/noticias/honduras-familia-zelaya-acusaciones-narco-2024/
La Prensa. (2025, 9 de abril). Tegucigalpa paralizada por Cumbre CELAC: 5,000 policías y 2,000 militares desplegados. https://www.laprensa.hn/nacionales/cumbre-celac-2025-seguridad
OEA (Organización de los Estados Americanos). (2023). Análisis comparativo de organizaciones regionales en las Américas. https://www.oas.org/es/publicaciones/organizaciones-regionales-2023
Reuters. (2025a, 10 de enero). Las conversaciones sobre una moneda BRICS flaquean mientras India se retira. https://www.reuters.com/negocios/brics-moneda-2025
Reuters. (2025b, 15 de marzo). Las amenazas arancelarias de Trump se ciernen sobre América Latina. https://www.reuters.com/mundo/americas/aranceles-trump-2025
Reuters. (2025c, 3 de abril). Las exportaciones de petróleo de Venezuela caen 11.5% en medio de nuevas sanciones de EE.UU. https://www.reuters.com/negocios/energia/sanciones-petroleo-venezuela-2025
Reuters. (2025d, 5 de abril). Las naciones de Petrocaribe se tambalean mientras el petróleo venezolano se agota. https://www.reuters.com/mundo/americas/petrocaribe-2025
The Hindu. (2025, 20 de febrero). Jaishankar: No hay moneda BRICS en el futuro cercano. https://www.thehindu.com/noticias/internacional/brics-moneda-jaishankar-2025
UNDRR (Oficina de las Naciones Unidas para la Reducción del Riesgo de Desastres). (2023). Honduras: Perfil de riesgo de desastres. https://www.undrr.org/publicacion/honduras-perfil-riesgo-2023
USDA (Departamento de Agricultura de Estados Unidos). (2025). Perspectiva de exportaciones de Honduras 2025: Café y textiles bajo presión. https://www.usda.gov/informes/honduras-exportaciones-2025
Casa Blanca. (2025a, 24 de marzo). Orden ejecutiva sobre aranceles para competidores estratégicos. https://www.whitehouse.gov/sala-de-prensa/ordenes-ejecutivas/2025/03/24/aranceles
Casa Blanca. (2025b, 27 de febrero). Orden ejecutiva que revoca licencias petroleras en Venezuela. https://www.whitehouse.gov/sala-de-prensa/ordenes-ejecutivas/2025/02/27/sanciones-venezuela
Banco Mundial. (2024). Panorama de la pobreza en América Latina y el Caribe 2024. https://www.bancomundial.org/es/region/lac/pobreza-2024