¿Qué existe detrás de la puerta? AMOS Global Energy Management en el petróleo y gas de Venezuela
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¿Qué existe detrás de la puerta? AMOS Global Energy Management en el petróleo y gas de Venezuela

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En el intrincado ámbito de la energía global, AMOS Global Energy Management está emergiendo como un jugador significativo, particularmente tras su reciente acuerdo para adquirir intereses en petróleo y gas natural de la empresa estatal china SINOPEC en Venezuela. Esta startup con sede en Houston no es simplemente una entidad ordinaria; está respaldada por una visión estratégica y moldeada por las complejidades de la política energética internacional.

¿Estaría el régimen venezolano apostando por un alivio o levantamiento de sanciones estadounidenses? No tenemos afirmación de que esto ocurriría, pero podría existir una división sobre el futuro de sanciones contra Venezuela dentro del círculo del presidente Trump, entre Richard Grenell y el Secretario de Estado Marco Rubio. Estas diferencias que existen entre estas dos posiciones dentro de la administración solo resultan en la oxigenación del régimen criminal de Nicolás Maduro.

Antecedentes de AMOS

AMOS Global Energy Management es una empresa estadounidense de energía upstream centrada en capitalizar oportunidades dentro del sector del petróleo y gas. El liderazgo del CEO Alí Moshiri, quien tiene una amplia experiencia en exploración y producción como expresidente de Chevron para África y América Latina, posiciona a AMOS para navegar eficazmente el desafiante panorama de las inversiones energéticas.

La adquisición de intereses de SINOPEC

La adquisición de los intereses de SINOPEC en la empresa mixta PetroParia, principalmente propiedad de la compañía estatal de Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA), representa un movimiento pivotal para AMOS. Esta empresa conjunta está situada en el Golfo de Paria, un área rica en potencial no explotado para la producción de petróleo y gas. Observadores en este tema han señalado que los desafíos de SINOPEC para desarrollar estos activos provienen de disputas de gestión con PDVSA, ilustrando las complejidades de la inversión extranjera en Venezuela.

Intenciones estratégicas

La estrategia de adquisición de AMOS abarca varios factores clave:

1.  Anticipación de alivio de sanciones: Con las sanciones estadounidenses afectando el sector petrolero de Venezuela, AMOS está apostando por un futuro en el que estas restricciones puedan ser levantadas, facilitando un resurgimiento en la producción y capacidades de exportación. Al asegurar estos activos ahora, AMOS busca posicionarse de manera ventajosa para condiciones de mercado favorables.

2. Potencial para oportunidades de exportación: El Golfo de Paria presenta perspectivas significativas, especialmente para exportaciones de gas a Trinidad y Tobago. Esto se alinea con las discusiones en curso sobre el desarrollo de campos de gas que atraviesan la frontera con Venezuela, que son cruciales para revitalizar la producción en declive.

3. Estrategia de inversión a largo plazo: AMOS está preparado para aumentar la producción en Venezuela a medida que se levanten las sanciones, mostrando un compromiso con el crecimiento sostenible en una región rica en recursos pero plagada de inestabilidad política y económica.

Navegando por los obstáculos regulatorios

Completar esta adquisición implica navegar por diversos desafíos regulatorios. La aprobación tanto de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro de EE. UU. como del ministerio de hidrocarburos de Venezuela es esencial. Este escrutinio regulatorio destaca la importancia del cumplimiento y la intrincada interacción entre intereses políticos y económicos en el sector energético.

Resumen del anuncio de la empresa mixta

La asociación consiste en GAGE Venezuela Holdings LLC, una colaboración entre AMOS Global Energy Management LLC (AGE) y Gramercy Funds Management LLC, e Inepetrol, S.A., una subsidiaria de Inelectra S.A.

La empresa conjunta tiene como objetivo desarrollar intereses en petróleo y gas en el Golfo de Paria frente a las costas de Venezuela, específicamente a través de las empresas mixtas Petro Güiria y Petro Paria.

Matt Maloney de Gramercy expresó optimismo sobre la revitalización del sector petrolero de Venezuela, señalando beneficios para los consumidores y la economía, junto con el potencial de recuperación económica de Venezuela. Alí Moshiri enfatizó la importancia de la empresa conjunta en equilibrar la oferta y la demanda de petróleo, mientras que Jorge Rojas de Inelectra destacó la experiencia de AGE y la esperada revitalización de la industria venezolana.

Cualquier actividad de inversión requerirá aprobación de la Oficina de Control de Activos Extranjeros del Tesoro de EE. UU. y del gobierno venezolano.

Antecedentes de la compañía

AMOS Global Energy Management (AGE) fue fundada en 2019 y tiene su sede en Houston, TX. Está liderada por Alí Moshiri, el expresidente de Chevron para África y América Latina, centrada en gestionar oportunidades de recursos en América Latina.

Gramercy Funds Management, establecida en 1998 y con sede en Greenwich, CT, se especializa en la gestión de inversiones en mercados emergentes a través de múltiples clases de activos.

Inelectra es reconocida por proporcionar soluciones técnicas integradas en el sector energético como una corporación de ingeniería y construcción.

Importancia estratégica

La empresa conjunta es un paso crucial hacia la revitalización del sector petrolero de Venezuela, lo que podría llevar a una recuperación económica y mejorar la seguridad energética para EE. UU.

Descripción general de las sanciones de EE. UU. contra Venezuela

Desde 2005, los Estados Unidos han implementado sanciones dirigidas contra individuos y entidades venezolanas involucradas en prácticas criminales, antidemocráticas o corruptas. Estas sanciones han evolucionado a través de órdenes ejecutivas y acciones del Congreso, particularmente en respuesta a la creciente represión y corrupción bajo el régimen de Nicolás Maduro.

En noviembre de 2022, se ofreció un alivio limitado de sanciones tras negociaciones entre Maduro y la oposición. Se otorgó una licencia general de seis meses en octubre de 2023 para facilitar la participación en el sector petrolero y de gas de Venezuela, que fue revocada en abril de 2024 debido a violaciones de la hoja de ruta electoral. La administración reconoció al candidato opositor Edmundo González Urrutia como el ganador legítimo de las elecciones en medio de acusaciones de fraude electoral, endureciendo aún más las sanciones contra funcionarios de Maduro.

Estas sanciones abarcan medidas individuales, financieras y sectoriales, restricciones de visas, prohibiciones de ventas de armas y sanciones de bloqueo de activos por tráfico de drogas y acciones antidemocráticas.

La administración ha fluctuado en la emisión y revocación de licencias, con un apoyo congresional constante a las sanciones contra el régimen de Maduro.

Licencias de petróleo

La Oficina de Control de Activos Extranjeros renovó la licencia de Chevron para operar en Venezuela, vital para el régimen de Maduro. Esta licencia ha estado en renovación automática desde 2023, permitiendo a Chevron continuar sus operaciones que contribuyen significativamente a la producción de petróleo de Venezuela.

Cambio en los objetivos de política

La administración de Trump parece priorizar resultados inmediatos sobre estrategias a largo plazo destinadas a restaurar la democracia en Venezuela. Este enfoque plantea preocupaciones sobre el potencial conflicto con las políticas de licencias de petróleo, ya que mantener estas licencias podría fortalecer inadvertidamente el poder financiero de Maduro.

Posibles caminos de política

Opción 1: Mantener las licencias de petróleo podría mejorar las condiciones económicas de Venezuela y disuadir la migración masiva mientras estabiliza la región al potencialmente crear empleos y reducir la pobreza. Sin embargo, podría aumentar la capacidad financiera de Maduro sin responsabilidad y mantener la Ley Antibloqueo que permite operaciones secretas.

Opción 2: Revisar la política de petróleo podría imponer medidas más estrictas contra Maduro, limitando su acceso a fondos y reduciendo el control autoritario. Revocar o modificar la licencia de Chevron podría evitar que el régimen se beneficie de los ingresos petroleros. Por otro lado, esto podría exacerbar la crisis humanitaria y desestabilizar una economía venezolana ya frágil.

Implicaciones de la capacidad financiera de Maduro

El régimen de Maduro se beneficia de los ingresos petroleros, que controla sin transparencia. El marco actual de sanciones, paradójicamente, le permite una mayor libertad en la gestión de estos fondos, consolidando así la corrupción y las violaciones de derechos humanos.

Abordando la corrupción y la inestabilidad

Los altos niveles de corrupción en Venezuela, respaldados por los ingresos petroleros, probablemente fortalezcan a organizaciones criminales como el Tren de Aragua. Las medidas propuestas para mitigar estos problemas incluyen reformar las licencias de petróleo para hacer cumplir la transparencia, establecer un fondo humanitario financiado por ingresos petroleros y reestructurar las cargas económicas relacionadas con la deuda de Venezuela.

Posibles implicaciones del levantamiento de sanciones

Levantar todas las sanciones y proporcionar más licencias a las compañías petroleras estadounidenses bajo la administración de Trump podría tener implicaciones significativas para la libertad y el regreso a la democracia del pueblo venezolano. Varios resultados potenciales merecen consideración:

1. Fortalecimiento del régimen de Maduro: Levantar las sanciones puede aumentar los recursos financieros para el gobierno de Maduro, permitiéndole mantener el poder de manera más efectiva, lo que podría consolidar prácticas autoritarias y disminuir las perspectivas de reformas democráticas.

2. Alivio económico vs. responsabilidad política:

Los ingresos petroleros restaurados podrían aliviar algunas dificultades económicas para la población venezolana, pero pueden no conducir a la responsabilidad política o a mejoras en la gobernanza. Un mayor financiamiento podría empoderar aún más a Maduro para suprimir la disidencia.

3. Impacto en los movimientos de oposición: El apoyo financiero mejorado para el régimen podría debilitar a los grupos de oposición, obstaculizando su capacidad para movilizarse contra la autoridad de Maduro y estancando el impulso hacia procesos democráticos.

4.  Preocupaciones sobre Derechos Humanos: Si se levantan las sanciones sin mejoras correspondientes en las prácticas de derechos humanos, el régimen podría continuar reprimiendo a activistas y opositores políticos, erosionando aún más las libertades.

5. Relaciones internacionales y percepción: Levantar las sanciones podría alterar la percepción de la comunidad internacional sobre el régimen de Maduro, lo que podría llevar a una normalización de relaciones y disminuir la presión externa para reformas democráticas.

6. Potencial de corrupción: Un aumento en los ingresos petroleros podría exacerbar la corrupción existente, ya que el régimen podría explotar estos fondos sin transparencia, socavando los esfuerzos para construir instituciones democráticas.

Conclusión

El análisis del papel de AMOS Global Energy Management en el petróleo y gas de Venezuela revela una compleja interacción de intenciones estratégicas, desafíos regulatorios y las amplias implicaciones de las sanciones estadounidenses. Si bien levantar las sanciones y otorgar más licencias podría proporcionar alivio económico a corto plazo y estabilizar el sector petrolero, corre el riesgo de consolidar el régimen autoritario actual en Venezuela y retrasar el regreso a la democracia. Para que se realicen las aspiraciones de libertad y democracia del pueblo venezolano, cualquier compromiso económico debe estar vinculado a compromisos significativos por parte del gobierno de Maduro en cuanto a reformas políticas, respeto a los derechos humanos y rendición de cuentas. Equilibrar estos intereses será fundamental para fomentar un futuro sostenible y democrático para Venezuela. En este contexto, las posiciones entre Richard Grenell y Marco Rubio podrían estar diametralmente opuestas, ya que Rubio ha dejado muy claro que el régimen de Maduro debe salir como sea. Grenell, por otro lado, ha señalado que las sanciones impuestas contra Venezuela no funcionan.

Jugadores clave y contexto

Alí Moshiri, expresidente de Chevron para América Latina y África, es actualmente el presidente de AMOS Global Energy y Gramercy & AMOS Venezuela Holdings (GAGE). Se está enfocando en reintegrarse al negocio de los hidrocarburos en Venezuela.

Jorge Rojas, presidente de Inelectra, es un aliado de Moshiri en la promoción de la producción de crudo en Venezuela.

Nicolás Maduro es el presidente de Venezuela, quien ha dado su aprobación al proyecto liderado por Moshiri y Rojas.

GAGE es una empresa formada por AMOS Global Energy, Inelectra y Gramercy Funds Management, con planes para que PDVSA renuncie a su participación mayoritaria en las empresas mixtas Petrolera Paría y Petro Güiria.

Se espera que OFAC otorgue las licencias necesarias, aunque la indecisión política afecta el progreso del acuerdo.

El contexto histórico incluye el papel de Moshiri en mantener a Chevron en Venezuela cuando los competidores se retiraron en 2007. Chevron ha mantenido su alianza con PDVSA a lo largo de las administraciones de Hugo Chávez y Nicolás Maduro, enfrentando diversos desafíos.

Los desafíos legales difieren de los enfrentados por Conoco Phillips y Exxon Mobil, que optaron por el arbitraje internacional. Chevron ha seguido una estrategia diferente en la gestión de sus disputas.

Estas ideas elucidaron los jugadores clave y las dinámicas políticas y económicas que dan forma a la industria petrolera en Venezuela.

Créditos

The Wall Street Journal  

Reuters  

Bloomberg  

Financial Times  

The New York Times  

The Houston Chronicle  

World Oil